Libertad
A veces tengo que luchar contra el antiguo impulso de guardar silencio a toda costa, porque me he dado cuenta de que compartir es la clave de la recuperación.
Por ejemplo, estaba avergonzada de mi apariencia física, especialmente de mi sonrisa. Años de humillaciones por parte de parientes alcohólicos me habían hecho sentir muy insegura. Me parecía que lo mejor era revelar lo menos posible de mí y evitaba sonreír. Desafortunadamente seguía creyendo en las críticas, por lo que me sentía muy mal conmigo misma.
Al compartir honestamente con personas en quienes confío, afronto las ideas negativas. Mis amigos en Al-Anon me aseguran que las críticas fueron exageradas. Nadie me niega valor debido a mi sonrisa. En Al-Anon puedo salir de mi escondite. Hasta he conquistado la libertad de sonreír.
Valor para cambiar. Pág. 111